Harrison Ford pisó de nuevo el Paseo de la Fama de Hollywood (EEUU) para estrenar su nueva película The Call of the Wild, basada en la clásica novela homónima publicada en 1903 y ambientada en plena fiebre del oro estadounidense.
«La historia habla de nuestra relación con la naturaleza, en esta ocasión entre un humano y un perro. Pero el perro representa a todo el mundo natural», explicó el propio Harrison Ford a EFE minutos antes de que se proyectara el filme por primera vez en el teatro El Capitán, lugar en el que Disney presenta la mayoría de sus proyectos.
Inspirada en el cuento de Jack London, esta cinta se adentrará en la fiebre del oro estadounidense para narrar la historia de un explorador, John Thornton, encarnado por Ford, y un perro doméstico que es trasladado al polo norte como tirador de trineo, ya que en aquella época los perros de tiro se pagaban a precios muy elevados.
Ambos tratarán de sobrevivir en las temperaturas heladas de Yukon, una de las provincias de Canadá más cercanas al polo norte.
Se trata del primer proyecto original que protagoniza Ford desde 2015, pues en los últimos años participó en nuevas entregas de Star Wars y Blade Runner, por lo que la expectación en Hollywood era máxima al ver a uno de sus veteranos al frente de una nueva película.
«Ha sido un placer contar esta historia», aseguró el actor sobre la nueva adaptación al cine de esta popular novela, que se llevó a la gran pantalla por primera vez en formato mudo en 1923 y ha contado en posteriores versiones con Charlton Heston (1972), Rutger Hauer y Richard Dreyfuss (1997), entre otros.
Además de profundizar en la relación entre el animal y el hombre, la nueva cinta promete ser una gran exhibición de efectos especiales, al igual que pasó con la historia compartida por el tigre y el joven Suraj Sharma en The Life of Pi.
Con un presupuesto que superó los 100 millones de dólares, el trabajo en efectos ha sido fundamental para dar vida al perro Buck mediante imágenes generadas por ordenador, explicó el supervisor de este apartado Jeremy Hays, que trabajó con el objetivo de dar con un resultado completamente realista.
«Toda la nieve que creamos es falsa o generada por ordenador. No viajamos a Alaska ni a Canadá aunque toda la historia transcurre allí –explicó–. Pero Harrison es genial, muy talentoso, y un caballero muy amable que se tomó la dirección muy bien en escenas que requerían efectos o cuestiones de seguridad.»
El resto del reparto, con los intérpretes Omar Sy, Karen Gillan y Colin Woodell, también estuvieron en el estreno, además de invitados como AJ Mclean del grupo musical Backstreet Boys.
«Soy un gran fan de Harrison Ford y leí este libro cuando era un niño, así que tenía que ver esta versión de la película, que ya se ha contado tantas veces», aseguró el cantante días antes de comenzar una gira por Latinoamérica.