Cuando llega la medianoche del 31 de diciembre, tanto en Paraguay como en Argentina, las familias y amistades se reúnen no solo para brindar, sino también para llevar a cabo una serie de rituales y cábalas que, según las creencias populares, ayudarán a atraer amor, dinero, salud y prosperidad en el año que comienza. Aunque algunas son compartidas entre ambos países, otras tienen particularidades locales que las hacen únicas.
1. Las 12 uvas para los 12 deseos
Al igual que en otros países de habla hispana, en Argentina y Paraguay es costumbre comer 12 uvas a medida que suenan las 12 campanadas que marcan el inicio del nuevo año. Cada uva representa un mes del año y un deseo que se espera cumplir.
2. Ropa interior de colores
Una de las tradiciones más extendidas es usar ropa interior de un color específico. En Paraguay y Argentina, el amarillo es el más popular, simbolizando la abundancia y el dinero, mientras que el rojo es elegido para atraer el amor y la pasión.
3. Salir con una maleta vacía
Esta cábala es infaltable para quienes desean viajar durante el año nuevo. En ambos países, muchas personas dan una vuelta a la manzana o caminan por el barrio con una maleta vacía, simbolizando el deseo de nuevos destinos y aventuras.
4. Dinero en los zapatos o en el bolsillo
En Paraguay y Argentina, colocar un billete dentro de los zapatos o llevar dinero en el bolsillo derecho al momento del brindis es una práctica habitual. Se cree que este gesto asegura la prosperidad económica durante el año que comienza.
5. El tradicional brindis con anillo en la copa
En Argentina, es común colocar un anillo de oro en la copa de champán antes del brindis de medianoche. Este gesto representa el deseo de atraer abundancia y estabilidad económica. Aunque en Paraguay no es tan común, algunas familias lo practican.
6. Quemar lo viejo
En Paraguay, especialmente en zonas rurales, se acostumbra quemar muñecos que representan el año que termina. Este acto simboliza dejar atrás lo negativo y purificar el camino para el nuevo ciclo. En Argentina, esta tradición también se ve en forma de «Año Viejo», muñecos elaborados con trapos, papel y fuegos artificiales que arden a medianoche.
7. Barrer hacia afuera
En ambos países, barrer la casa justo antes de la medianoche, especialmente hacia la puerta principal, simboliza sacar las malas energías y limpiar el espacio para recibir el nuevo año con buenas vibras.
8. Subir a una silla o escalón
En Argentina, existe la creencia de que subir a una silla o escalón justo cuando el reloj marca las 12 asegura «elevarse» en la vida, alcanzar metas y superar obstáculos. En Paraguay, esta práctica es menos común, pero algunos también la realizan.
9. Comer lentejas
En Argentina, se acostumbra comer una cucharada de lentejas en la última cena del año o justo después de la medianoche. Este pequeño gesto representa prosperidad y abundancia. Aunque en Paraguay no es tan popular, ha comenzado a adoptarse en algunos hogares.
10. El baño de hierbas o flores
En Paraguay, algunas personas realizan baños con hierbas aromáticas o pétalos de flores para limpiar las energías negativas y atraer paz y amor al nuevo año. Esta práctica, vinculada a las creencias populares y ancestrales, sigue vigente en muchas comunidades.
Ya sea siguiendo estas cábalas al pie de la letra o simplemente por tradición familiar, tanto en Paraguay como en Argentina, estos rituales forman parte del espíritu festivo de la última noche del año. Más allá de las supersticiones, cada gesto simboliza el deseo universal de comenzar un nuevo ciclo con optimismo y buenos augurios.